No se trata de negar la
necesidad de que los centros educativos públicos estén conectados
a Internet y/o dispongan de redes locales. Faltaría más. Pero tanto la
modalidad Internet, Intranet como Extranet plantean varios
interrogantes. Una descripción del panorama actual,
sin duda limitada y parcial, podría ser la que sigue:
Existen
ya
centros públicos conectados para consultar a lo largo de todo el curso
la resolución del
Concurso de Traslados y poco más o enviar un e-mail
muy de cuando en
cuando; centros públicos que no disponen de aula
de informática organizada o disponen de un aula concebida en
la práctica como canguro virtual para
alumnos complicados; centros de veinticuatro o más unidades que poseen
cuatro o cinco
ordenadores obsoletos y desconocen cómo rentabilizarlos; sectores
amplios del profesorado que ignoran lo que es un ordenador o
comienzan a trabajar con esta máquina entre la fascinación, el recelo y la duda;
profesores que dominan ampliamente el mundo de la informática, pero sólo pueden
utilizarla para elaborar sus apuntes personales para las clases; también, centros que
disponen de un aula de informática con una aceptable planificación
de la
EAO y muchos centros públicos
que ya disponen de una red local aunque sólo sea para la gestión y administración del Centro; centros,
por otro lado, con grabadora
de CDs con la que realizan copias piratas desconociendo qué otra
función educativa pueden darle; centros con su propia página web
concebida como postal turística y poco más, software educativo que se
acumula y dormita en despachos o en aulas multiuso y del que se comenta "
es una maravilla de
programa " sin otro tipo de consideraciones; sites de instituciones educativas que repiten
machaconamente el mismo index con idénticos tópicos y enlaces, ...
Por el contrario, aumenta
el número de alumnos de secundaria y bachillerato
que gustan y prefieren presentar sus trabajos en disquetes,
incluso en CD
incorporando recursos
multimedia; alumnos de Universidad que junto a la bibliografía
obligada incorporan direcciones
de Internet; publicidad persistente en
todos los medios de comunicación sobre la revolución que están suponiendo las nuevas tecnologías,
particularmente en el mundo de la
enseñanza; bajada en picado del índice de lectores textuales; alumnos
de secundaria que obtienen un diez en Informática y suspenden casi todas las
demás asignaturas, difusión acrítica y generalizada de creencias como vivimos en la época
de la globalización, quién no esté conectado no tendrá
poder y quedará marginado, una imagen vale más que mil palabras,
...
Es
pertinente, por tanto, el debate. La pregunta podría enunciarse
así:
¿Supone INTERNET
y, en general, todo lo relacionado con el mundo de la informática, un recurso imprescindible y urgente
para la enseñanza o, en cambio, se trata de algo que puede esperar ante
asuntos más relevantes y prioritarios?.
¿En el segundo supuesto, cuáles serían
a tu juicio esos asuntos relevantes y prioritarios?
